Escritos colegiales... que salen del cuaderno

Cabellos y telarañas

La señorita Satanás esta escurriendo lagrimas.

Lagrimas de acido venenoso que dulcemente se hacen en su cerebro con la ayuda de unos demonios riñones, y que al salir de un hoyito de sus ojos al espacio exterior, corroen a piel que materialmente envuelve, aprisiona su ideal alma.

Un alma sin forma y sin color… y sin sabor. Demasiado pequeña, demasiado grande, demasiado dura, complicada de cargar, compuesta por cuchillos irracionales, justo bajo su piel.

Su piel, una piel que quiere usar para parecer un hombre… tal vez para poder mezclarse entre ellos. Para querer solo beber su sangre y desechar sus cuerpos. De la forma más triste. De la forma más conmovedora se mezcla entre ellos.

 --Apesta la piel de los hombres… apesta y lastima. Queman lo que miran sus ojos gusanos y huyen  rápido sus patas cucaracha—, piensa, mientras una maquina flor en su cabeza tritura unos cuantos cerebros.

Cerebro que ha aprendido a pensar pensamiento insurgente y a agonizar en ansia belicosa,… y a someter su alma y su sentir.

Las células. Suspicaces, sobresaltadas. Agitadas por el estruendoso latir de su corazón… envuelto en el halo de ira del acero.

Ira de acero afilada. Ciega. Ira afilada a las lágrimas, a la cordial zozobra, al calor del calor humano.

Que dulce tono cálido el del sigiloso atardecer y que amorosamente ilumina su habitación,
suavemente le permite ver cuán hermosos son los ovillos que esta hilando.
Soberanos hilos de sangre.
Soberana… que las luciérnagas cantan.

Cabellos largos en venenosas puntas flechas… peinados por las vagas intenciones.
Dedos… delicadamente sumisos, agiles, suavecitos.
Mejillas… pálidamente sonrojadas
Labios… en su rostro, bajo su nariz.
Ojos… amaestrados por la ausencia.

Y un joven prendedor en su pecho.
Oh!!… Acaso esta prendido en su piel??... que apasionado se ha sellado para no irse nunca mas.
Fino prendedor hecho de soberbio material fundido al fuego del tedio y esculpido por la herramienta demente…
concedido por el señor miedo.

Dulce imagen en la noche. Su cuerpito exaltado. Su expresión desexpresada. Debe estar reflexionando sobre la libertad… quien hizo aprisionar…
qué técnica usara para desollar?

Escaparse por los ojos

Pienso bajo el relieve
Sueño sobre el cielo
Y un rápido trazo raya mi rostro.

Mi vida se me va por la nariz
La vida se me asoma por la piel
Con sangre se puede teñir el espacio.

Creí que había muerto
Las voces me dijeron que no
Las voces se esfumaron
Que significa estar muerta?

Estoy volando
Presencio la sinapsis colectiva
No deseo dejar de volar
Porque no me dejan caminar?
Las miradas me queman
El dialogo terrestre me enferma

Quiero volar mas alto!
Si me acerco me derrito
No tengo donde ponerme
Quien se puede olvidar de su imagen al espejo?

Invocación:  oh! Diosa de las ausencias regálame un espejo por favor

Rómpeme el cráneo. Saldrá volando mi cerebro… alcanzare el más sublime pensamiento

Al lugar que no existe iré, allí me encontraras.

La más transparente visión de la sensibilidad tendré

Desgarra mi pecho y mi corazón podrá sentirte, por fin podrá sentir tu presencia. Tú agradable presencia.

Mi sangre tendrá que salpicar el espacio y hasta en tus ojos entrará, por fin podre ver lo que entiendes.

Entonces desollad mi piel  y vístete con ella. Así podre cubrirte. Protegerte.

Hazlo.

Porque de otro modo seré yo quien te sacará los ojos… densa visión de ti.

 Y usare tu piel cual codiciado abrigo de pieles. De tu piel la más tibia que he podido sentir.

Y beberé tu sangre, pues solo así podre sentir que estas en mi. Que estas con migo.

Muéstrame la manera. ¡Muéstrame el camino!  ¡Muéstrame tu rostro!

Pues ya no siento el miedo y logré  deshacerme del pasado.

Trágate mi moral y haz que sienta tu lengua lamer mi alma.

Permíteme conocer, permíteme entender, permíteme expresarte  y manifestar tu belleza.